Puede que (siendo quiénes sois los que os pasáis por aquí, estoy seguro) hayáis visto en internet últimamente un par de cosas curiosas del Final Fantay VII: unas imágenes del juego en PlayStation 3 (aunque siguen diciendo que no habrá remake, que sólo era una demo técnica, que no hará remake) e imágenes de la versión pirata del juego para NES (analizado en Pixfans y con entrada wikipédica). Por cierto que, últimamente la NES, por mucho que la retiraran el soporte técnico hace un tiempo, sigue de moda. Ejemplo: los 100 mejores juegos de NES para jugar en el navegador.

Pero no estoy aquí, hoy por lo menos, para hablar de la NES, que seguro que otro día lo estaremos, sino del Final Fantasy VII, quizás el RPG (o uno de los...) más exitoso de la historia y de los que más fans arrastran. Una prueba de ello, y no hace falta que me ponga a decir lo bueno que es el juego, que de eso hablaremos ahora, son la multitud de spin-offs que han aparecido sobre este juego, algo realmente inusual: una notable película que continúa la historia (aunque especial para los fans del juego), el Dirge of Cerberus (y Dirge of Cerberus Lost Episode, para móviles), el Crisis Core, el Before Crisis, Last Order (un anime), FFVII: Snowboarding (para móviles) y todo tipo de merchandising, hasta refrescos... todo un mundo, y por algo será.

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Final Fantasy VII - 1997 (PlayStation) y 1998 (PC)

Intro
Después de que la PlayStation apareciera en 1995, servidor no vio un buen momento para comprarla sino cuando apareció, hace más de 10 años ya, el Final Fantasy VII. Leía en las revistas los análisis y me prendaba de su argumento y de sus gráficos, algo que yo no conocía demasiado por entonces.
Pero, dejando de lado la experiencia personal, hay que reconocer, guste o no el juego, que el FFVII marcó un antes y un después en la industria del videojuego y, sobre todo, en la masificación del género fuera de las fronteras niponas, algo que, es cierto, los últimos RPGs de la SNES ya habían empezado a hacer con fuerza, con juegos como el propio FFVI, el Illusion of Time/Gaia, el Terranigma, el Secret of Evermore (juego que odio porque apareció en España en vez del Chrono Trigger), el Lufia II... y eso que no aparecieron juegos como el Tales of Phantasia o Star Ocean...

Inicialmente, tal y como yo supe leyendo la revista Micromanía en su momento, el juego estaba desarrollándose para la nueva consola de Nintendo, la Ultra 64, cosa lógica si tenemos en cuenta que las plataformas de los Final Fantasy habían sido hasta el momento de Nintendo, pero diferentes diferencias (valga la redundancia) con la compañía y otros problemas, además de la inteligencia de Sony, hicieron que el proyecto recalara en la nueva videoconsola de la gran compañía. En Nintendo no sabían lo que habían perdido.


Historia
Un mercenario ayuda a Avalancha... sinceramente no sabría resumirlo y no contar demás, así que voy a copiarlo de la Wikipedia:
El juego empieza con Cloud, un misterioso, frío y solitario "Ex-SOLDADO", quien se infiltra a la ciudad capital de Midgar junto a un grupo ecoterrorista "Avalancha" para tratar de volar una planta de energía "mako", que extrae la fuerza vital del planeta para usarla como fuente de energía.
Y creo que sería mejor decir "hasta aquí puedo leer", porque es mejor jugarlo. Y es que, para mí, la historia del juego es la mejor de la saga (seguido por las entregas VI y VIII de cerca: de hecho, el ponerlo por encima es una opción personal y mucha gente no lo hará), muy por encima, como os comentaba hace tiempo, de la que vimos en la última entrega de PS2.

Gráficos
Incluso entonces, hace 10 años, mi hermano y yo jugábamos y decíamos, ¿pero porqué no tienen manos los personajes? Pero vayamos por partes, ya que hay tres ámbitos, mejor cuatro, del juego en que los gráficos son totalmente diferentes, pero por completo:
- Secuencias de vídeo: desde la Intro, que terminaba fundiéndose magistralmente con el entorno de juego, hasta el final, nos mostraban cosas que, por lo menos yo, nunca había visto hasta el momento. Pero, no sólo eran buenas en los gráficos, ya que aparecían en los momentos más oportunos, eran espectaculares y bien hecha.
- Ciudades, pueblos, interiores...: durante gran parte del juego manejábamos a un personaje en 3D sobre unos fondos prerrenderizados soberbios y geniales, donde había otros muchos personajes y algunos elementos funcionales en 3D. El moldeado de los personajes era de lo más caricaturesco, pero lo que llamaba la atención era/es que los personajes no tienen manos, sino prismas, lo cual, teniendo en cuenta que el resto del cuerpo no estaba tan mal hecho, llamaba la atención. Sinceramente, pese al cante inicial, al final le coges cariño y ni te enteras de ello.
- Mapamundi: Aquí manejábamos a los mismos personajes que en el anterior caso pero sobre un entorno tridimensional, con montañas, ríos, fondos submarinos, desiertos... no es lo más llamativo del juego, ni de lejos, pero su funcionalidad es perfecta para mi gusto.
- Batallas: gráficamente era lo mejor del juego, y siempre te preguntabas ¿llegará el día en que mientras juegas los gráficos sean así?. La respuesta era "sí", y no tardando mucho, la verdad. El caso es que los gráficos tridimensionales, el diseño de enemigos, los ataques, las invocaciones, las magias, los límites... todo era espectacular y agradable a la vista.

Música y sonido
Nobuo Uematsu compuso una de mis músicas preferidas de RPGs, y durante mucho tiempo la escuché mientras estudiaba, por ejemplo. Poco más diré: genial.
En cuanto al sonido, para mi gusto la cosa es inferior, con algunos sonidos muy de broma y otros simplemente funcionales. Nunca me pareció un aspecto que molestara, pero creo que simplemente estaba ahí sin llamar la atención y ya está.

Jugabilidad, duración y diversión
El sistema de juego contaba con numerosos (sin duda una de las cosas que se puede acusar si no te gusta el género) combates por turnos en los que tenía el famoso sistema TBA (introducido en el FFIV) y donde manejábamos, al contrario que en juegos anteriores, como mucho a 3 personajes, pudiéndose cambiar la composición del grupo fuera de los combates.
En este juego sólo se podía guardar en puntos específicos y mientras se estaba en el mapamundi, lo cual hacía que hubiera tramos complicadillos, dependiendo del nivel de tus personajes.

El sistema de armas, magias y desarrollo introducía un método que no ha sido usado en ningún otro: el sistema de materias. Cada arma y armadura tenían unas ranuras en las que se podían poner materias que añadían magias, nuevas habilidades, invocaciones, fuerza extra, etc. Las materias, además, crecían de forma diferente en cada arma/armadura, y cuando llegaban a su último nivel, generaban una materia nueva "virgen" y podías hacer cosas que no podías hacer de otro modo, como usar la materia "Todos" siempre que quisieras en el combate, no sólo un número limitado de veces, además de aumentar la potencia de las magias e invocaciones.
Aquí las invocaciones se usaban como armas, algunas muy poderosas y raras, lo cual las hacía muy útiles, sobre todo cuando se combinaban con otras materias. Ejemplo: combinar "Fenix" con "Ataque final" así, cuando mueres, invocas a Fénix y todos resucitan (cuando tenías ambas materias al máximo nivel, era casi imposible morir: sólo si te echaban al personaje que lo tenía del combate). Ejemplo: combinar "Bahamut Zero" con "Cuadrimagia" y hacerla 4 veces seguidas. Ejemplo: juntar "Caballeros de la Mesa Redonda" con "Absorbe PG" y recuperarte del todo.
El sistema, pese a la pinta que tiene (eso es porque no me explico bien :P), me parece que tenía mucho potencial y era mucho más sencillo que otros posteriores.

La diversión era muy elevada, no sólo por la historia principal, sino por los retos adicionales (derrotar a arma rubí y esmeralda, criar chocobos dorados, conseguir a los personajes secretos...), las recreativas y minijuegos del Gold Saucer, las carreras de chocobos, obtener armas, límites, invocaciones, etc. especiales... El caso es que, para conseguir el juego al 100%, como yo lo he hecho, quizás haya que dedicar, la primera vez que lo haces, unas 110-120 horas. Claro, si usas guías o sabes cómo conseguirlo todo, la cosa se reduce... pero no mucho.

Conclusión
Una trama absorbente que se complica más allá de lo que vemos inicialmente, combates épicos, personajes carismáticos, buena música y gráficos, muchas horas de diversión y secretos... Quizás se pueda hacer una reseña que no esté tan influenciada por el amor que le tengo a este juego y, además, por gente que lo odia, pero yo nunca dejaré de recomendar que lo juguéis y rejuguéis (los que no lo hayan hecho, en la PSP hay opción de hacerlo).